Trump impone nuevo bloqueo a fábricas chinas de Samsung y SK Hynix: ya no podrán importar tecnología sin autorización de Estados Unidos

Nueva York, Estados Unidos, 20 de junio de 2025. — La administración del presidente Donald Trump ha decidido restringir severamente la entrada de equipos semiconductores estadounidenses a las fábricas chinas de las gigantes tecnológicas Samsung Electronics y SK Hynix, lo que marca un nuevo golpe en la rivalidad tecnológica entre Washington y Pekín, según el medio coreano MBC.

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Según reportes del Wall Street Journal, el Departamento de Comercio de Estados Unidos notificó esta semana a empresas surcoreanas y taiwanesas que el estatus de “exención general” ha sido cancelado, por lo que cada envío de tecnología a plantas ubicadas en China requerirá ahora una aprobación individual del gobierno estadounidense.

Dinero

Caen abruptamente pedidos industriales en Estados Unidos por efecto de aranceles

Samsung, SK Hynix y TSMC, en la mira de Washington

Las empresas afectadas por esta nueva política son Samsung Electronics y SK Hynix, de Corea del Sur, y TSMC, de Taiwán. Estas compañías operan fábricas clave en territorio chino, incluyendo instalaciones de memoria flash NAND, DRAM y posprocesamiento, lo que las convierte en actores críticos para la cadena global de suministros tecnológicos.

El objetivo, según medios estadounidenses, es cerrar aún más el paso a la transferencia de tecnologías sensibles hacia China, en medio del temor de que el país asiático las utilice para fortalecer su propia industria de semiconductores y ganar ventaja en la carrera por la supremacía tecnológica.

La exención de 2022 queda atrás y el conflicto comercial se reactiva

Durante el gobierno de Joe Biden, en 2022, se había emitido una prohibición similar que bloqueaba la transferencia de tecnología y personal especializado a China, pero se otorgaron exenciones a estas tres empresas debido al riesgo de interrupciones graves en la cadena de suministro global.

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Con esta nueva decisión, cada exportación deberá pasar por una revisión de seguridad industrial en Estados Unidos, lo que podría generar retrasos importantes y costos adicionales. La medida también amenaza con reavivar la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China, que hasta ahora se mantenía en una pausa tensa.

Todavía falta luz verde del Pentágono

A pesar del anuncio, el Wall Street Journal señaló que el Departamento de Comercio aún no ha recibido aprobación final de otras instancias clave del gobierno como el Departamento de Defensa, por lo que la implementación aún podría ajustarse.