ICE podría encontrarse al borde del colapso financiero por gasto excesivo en deportaciones
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas ha superado su presupuesto de 1,000 millones de dólares.

WASHINTON, Estados Unidos.- El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) podría agotar sus fondos antes de lo previsto debido al acelerado ritmo de gastos en las operaciones de deportación, impulsadas por el gobierno de Trump. Según un informe de Axios, la agencia ya ha superado su presupuesto en mil millones de dólares, a pesar de que aún quedan más de tres meses para el cierre del año fiscal.
Legisladores de ambos partidos han expresado alarma por el manejo financiero del ICE y su ente supervisor, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), encabezado por la secretaria Kristi Noem. Advierten que, de continuar este nivel de gasto, el DHS podría incurrir en violaciones legales.

La situación ha intensificado la presión para aprobar el llamado “gran y hermoso proyecto de ley”, que inyectaría 75,000 millones de dólares adicionales al ICE en los próximos cinco años.
El DHS ya reubicó casi 500 millones de dólares para redadas, pero requiere 2,000 millones más antes de septiembre
El senador demócrata Chris Murphy criticó duramente la administración: “El DHS de Trump está gastando como marineros borrachos”. Mientras tanto, la Casa Blanca exige que el ICE detenga a 3,000 inmigrantes diarios, una meta que el departmento no ha logrado alcanzar. Actualmente, los centros de detención, que poseen capacidad para 41,000 personas, ya operan con sobrecupo, y el gobierno busca ampliar espacios dentro y fuera del país.
Ante la crisis, Trump podría declarar una emergencia nacional para reasignar fondos de otras agencias, tal como hizo en 2020 al desviar 4,000 millones del Pentágono para el muro fronterizo. Chris Marisola, experto en derecho, señaló que una nueva declaración de emergencia “activaría estatutos de movilización que otorgan amplia discreción al presidente”.

El DHS ya reubicó casi 500 millones de dólares para redadas, pero requiere 2,000 millones más antes de septiembre. Tricia McLaughlin, subsecretaria del DHS, defendió el plan presidencial como “fundamental para la seguridad nacional”. No obstante, el congresista republicano Mark Amodei alertó: “El ICE gasta mil millones más de lo autorizado, y eso es ilegal. No pueden imprimir dinero”.
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Si el presupuesto se agota en julio, como anticipan algunos, el DHS violaría la Ley contra la Insuficiencia, que prohíbe gastar fondos no asignados. Aunque nunca se ha procesado a nadie bajo esta ley, los funcionarios podrían enfrentar cargos penales o multas. La incertidumbre financiera profundiza el debate sobre el costo de la política migratoria de Trump.
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