Profepa clausura residuos peligrosos en Jiutepec y obras ilegales en el Bosque de Agua de Morelos

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ejecutó dos operativos de clausura en el estado de Morelos esta semana. Estas acciones responden a infracciones ambientales de distinta naturaleza pero con un impacto común: el riesgo para los ecosistemas y la salud pública.

Una intervención se enfocó en un predio con residuos peligrosos en Jiutepec. La otra, en construcciones ilegales dentro de dos Áreas Naturales Protegidas.

Los casos muestran el mecanismo de acción de la autoridad ante denuncias y evidencian las presiones que sufren zonas de alto valor ecológico.

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¿Qué se encontró en el predio clausurado en Jiutepec?

Según el comunicado de Profepa, la clausura total temporal se decretó en un predio del municipio de Jiutepec. La acción se originó por una denuncia canalizada por la Dirección de Medio Ambiente municipal.

Durante una inspección el 12 de diciembre, personal de la Profepa constató, desde el exterior del predio cerrado, la presencia de:

• Tambos metálicos de 200 litros con lo que parecía ser aceite lubricante gastado.
• Filtros de aceite usados.
• Estopas y envases de plástico impregnados con aceite o grasa.
• Lámparas fluorescentes.
• Manchas negras en el suelo natural.

Todos estos residuos peligrosos se encontraban dispuestos directamente sobre la tierra, sin ninguna contención. Esta situación generaba un riesgo inminente de contaminación del suelo y de los acuíferos. La Profepa determinó que existía un peligro grave para el medio ambiente y la población, lo que justificó la clausura inmediata.

¿Por qué se clausuraron obras en Tlayacapan y Tepoztlán?

La segunda acción consistió en la clausura total temporal de cuatro obras en los municipios de Tlayacapan y Tepoztlán. Estas construcciones se localizaban dentro de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) “Corredor Biológico Chichinautzin” y “Parque Nacional El Tepozteco”.

Estas zonas son parte de la región conocida como el Bosque de Agua, de alta importancia ambiental para la recarga de acuíferos y la biodiversidad.

Las clausuras surgieron de denuncias ciudadanas y recorridos de vigilancia conjuntos con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).

En inspecciones realizadas entre el 27 de noviembre y el 10 de diciembre, se detectaron:

• Obras de casas habitación.
• Construcción de bardas y cisternas.
• Remoción total de vegetación.

Todas estas actividades se realizaban en terrenos con vocación forestal, dentro de un ecosistema de selva baja caducifolia.

Un elemento crucial es que carecían por completo de la autorización en materia de impacto ambiental que debe emitir la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Las construcciones estaban en obra negra y no habitadas.

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¿Cuál es el impacto de construir ilegalmente en estas Áreas Naturales?

La alteración ilegal de estos terrenos dentro de ANP conlleva riesgos graves y de largo plazo:

• Pérdida de recarga de acuíferos: El suelo forestal y la vegetación son esenciales para filtrar y absorber el agua que abastece a la región.
• Daño a la biodiversidad: Se destruye el hábitat de especies de flora y fauna, muchas de ellas endémicas o en riesgo.
• Alteración climática: Se reduce la capacidad del ecosistema para regular temperaturas y generar humedad.
• Incremento de riesgo de desastres: La remoción de vegetación aumenta la probabilidad de deslaves e inundaciones.

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¿Qué sigue después de las clausuras?

La Profepa ha iniciado los procedimientos administrativos correspondientes en ambos casos. El proceso continuará para determinar:

1. Las sanciones económicas aplicables a los responsables.
2. Las medidas correctivas que deben implementarse.
3. Los planes de restauración ambiental para las zonas afectadas.

Todo ello se hará conforme a la legislación ambiental vigente, como la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.

La dependencia reiteró que atenderá las denuncias ciudadanas como un instrumento clave para la prevención y la protección del patrimonio natural y la salud de la población.

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