78% de consumidores si toman en cuenta los sellos en alimentos, según INSP

México.- A cinco años de la entrada en vigor del etiquetado frontal en alimentos y bebidas en México, especialistas destacan una reducción en el consumo de productos ultraprocesados y una reformulación en los ingredientes por parte de la industria para evitar los sellos de advertencia. Estos cambios se han observado como parte de una estrategia integral para mejorar la salud pública.

Durante el foro “Etiquetado frontal de advertencia: cinco años protegiendo la salud pública y los derechos humanos”, expertos señalaron que este sistema ha generado una disminución en el consumo de azúcar, sodio y grasas.

Simón Barquera, del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), informó que el contenido de azúcar en bebidas industrializadas se redujo hasta ocho gramos por litro, lo que equivale a toneladas de azúcar menos consumidas anualmente.

México | Noticias de México | EL IMPARCIAL

¡Alerta! Estas frutas de temporada pueden mejorar tu salud y ahorrarte dinero, ¿las estás comprando?

Alejandra Contreras, también del INSP, destacó que el etiquetado ha influido en las decisiones de compra.

Estudios

Según estudios, 78% de los adultos considera los sellos antes de comprar, mientras que 80% de los padres y 40% de los adolescentes han modificado sus hábitos de consumo. Asimismo, se estima que los niveles de triglicéridos en la población han bajado de 200 mg/dl en 2018 a 170 mg/dl en 2023.

Por otro lado, la Secretaría de Educación Pública (SEP) implementará el 29 de marzo la prohibición de comida chatarra en las escuelas, como parte de una política más amplia que también incluye impuestos a estos productos y restricciones al marketing digital. Estas medidas buscan reforzar la lucha contra la mala alimentación y enfermedades crónicas.

También te puede interesar: Huevos con manchas rojas: origen y seguridad alimentaria

Sin embargo, persisten desafíos. Javier Palummo Lantes, relator especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, mencionó que la industria ha mostrado resistencia y ha aprovechado vacíos legales en la regulación.

Además, advirtió sobre la necesidad de que los estados refuercen sus regulaciones para evitar prácticas que puedan afectar la salud de los consumidores.