Un hombre regresó a su casa, descubrió que le habían cambiado la cerradura y sacado todos sus muebles

CIUDAD DE MÉXICO.- El pastor Mike Hall, residente de Luton, Inglaterra, recibió una llamada inesperada mientras se encontraba de viaje en Gales. Sus vecinos le informaron que su casa, adquirida en 1990, estaba ocupada por desconocidos. Sin perder tiempo, Hall tomó el primer vuelo de regreso al día siguiente para intentar esclarecer lo ocurrido.

Al llegar a su vivienda, se encontró con una escena desconcertante: las luces de la casa estaban encendidas, las ventanas abiertas y la cerradura había sido modificada, lo que le impedía ingresar con sus propias llaves. Al tocar la puerta, fue recibido por un arquitecto que estaba remodelando el lugar, ahora vacío de los muebles que solían llenarlo.

Un problema sin solución clara

Atónito ante la situación, Hall decidió llamar a la policía. Sin embargo, la respuesta no fue la esperada. A pesar de que todo sucedió en 2021, el caso sigue sin resolverse tres años después. El pastor relató su experiencia en el programa You and Yours de BBC Radio 4, describiendo el impacto emocional al ver su casa completamente despojada de todos los objetos que alguna vez le pertenecieron.

Policiaca

Aseguran a ocho personas por diversos robos

A medida que la investigación avanzaba, Hall descubrió que los ocupantes ilegales habían falsificado su identidad. Utilizando una copia de su licencia de conducir, abrieron una cuenta bancaria a su nombre y lograron vender la propiedad por 180 mil dólares. Ahora, el nuevo comprador es legalmente el propietario, lo que dejó al pastor en una batalla legal complicada.

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Búsqueda de justicia

La policía le informó que no podían hacer nada más, calificando el caso como un asunto civil y sugiriendo que contactara a sus abogados. Hall quedó sorprendido y en estado de shock, incapaz de creer que un fraude tan evidente no fuera considerado un delito.

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Actualmente, el pastor y su equipo legal continúan buscando una solución para recuperar la propiedad. Aunque han pasado varios años, el caso sigue sin resolverse en los tribunales británicos. Se espera que la intervención de las autoridades nacionales pueda ofrecer una resolución definitiva a este angustiante episodio.