Más que una joya

Más allá de ser una joya espectacular, representa un “sí” lleno de amor, compromiso y emoción; su forma circular simboliza la eternidad, sin principio ni fin, lo que lo convierte en el símbolo perfecto de una promesa para toda la vida.

Brillan las promesas

Existen varios tipos de anillos, y cada uno tiene su encanto; el solitario es el más tradicional: una sola piedra central que representa pureza y fortaleza; los anillos con halo, una piedra central rodeada de diamantes pequeños, son ideales para quienes aman el brillo extra, mientras que los de tres piedras simbolizan el pasado, presente y futuro de la relación; los estilos más modernos incluyen bandas con piedras de color, anillos con cortes geométricos o diseños minimalistas que hablan de un amor auténtico y contemporáneo.

Estilos

Amor en modo viajero

Formas de decir para siempre

El corte de la piedra también tiene un significado especial; por ejemplo, el corte redondo representa un amor clásico y eterno; el corte princesa, con sus esquinas marcadas, es para personalidades fuertes y románticas; mientras que el corte esmeralda transmite sofisticación y elegancia; el óvalo y el corte pera están en tendencia por su estilo único, delicado y elongado que alarga visualmente los dedos.

Colores que enamoran

En cuanto a materiales, el oro blanco y el platino siguen reinando por su elegancia atemporal, aunque el oro rosa ha conquistado a las novias jóvenes por su tono suave y romántico; también se ha vuelto popular optar por piedras alternativas como zafiros, esmeraldas o incluso diamantes “sal y pimienta” para quienes buscan una joya con más personalidad.

Ya sea clásico o moderno, sencillo o brillante, el anillo de compromiso es un reflejo del amor que se construye entre dos personas; más que una joya, es una declaración que se lleva en la mano, pero se siente en el corazón; elegirlo es el primer paso de una historia que apenas comienza, una joya para recordar que el amor verdadero siempre vale la pena celebrarse.