La psoriasis: un desafío para los pacientes

Tijuana BC.- Impulsada por las asociaciones de psoriasis y la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada 29 de octubre se celebra el Día Mundial de la Psoriasis con el fin de aumentar la conciencia, difundir la información y buscar mejoras en el acceso al tratamiento.

Si bien, la psoriasis es una enfermedad crónica e incurable de la piel, caracterizada por sequedad, agrietamiento, comezón y, a veces, sangrado. También se presenta con lesiones rojas, gruesas y escamosas de color blanco que causan incomodidad y dolor.

En México, aproximadamente 2.5 millones de personas padecen psoriasis, y de este grupo, entre el 25 y el 30% presentan síntomas moderados a severos, impactando su calidad de vida de manera significativa.

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Además de los síntomas en la piel, los afectados pueden desarrollar comorbilidades como artritis, problemas cardiovasculares, síndrome metabólico y diabetes, lo que amplifica la carga física, emocional y económica de la enfermedad.

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Afecta vida cotidiana

La psoriasis afecta a quienes la padecen en su vida cotidiana, especialmente si las lesiones aparecen en zonas visibles, como la cara y manos, lo que limita sus actividades y puede exigirles el uso de protección.

Aunque la psoriasis no es contagiosa, quienes la padecen enfrentan estigmas sociales, siendo a veces excluidos o aislados, lo que lleva a problemas psicológicos como vergüenza, baja autoestima, depresión y ansiedad.

Se trata de un padecimiento inmunomediado en el cual las células inmunes activan una respuesta inflamatoria anormal, causando que las células de la piel crezcan rápidamente, generando acumulaciones en forma de placas rojas y escamosas.

Tipos de psoriasis

Existen diferentes tipos de psoriasis, siendo la más común la psoriasis en placas, que afecta entre el 80% y 90% de los casos y suele aparecer en codos, rodillas, región lumbar, cuero cabelludo, palmas, uñas, plantas de los pies y genitales.

La enfermedad tiene una predisposición genética; un tercio de los pacientes tiene antecedentes familiares, aunque ciertos desencadenantes, como infecciones, tabaquismo, alcohol y medicamentos, pueden activar los síntomas.

La psoriasis puede ser difícil de diagnosticar debido a su semejanza con otras enfermedades de la piel y su presentación cíclica, con brotes y periodos de remisión, por lo que requiere un tratamiento personalizado de por vida.

El tratamiento

El tratamiento se centra en el control de los síntomas y varía según la gravedad, comorbilidades y necesidades del paciente. Las opciones incluyen fototerapia, tratamientos tópicos y medicamentos sistémicos, como orales o inyectables.

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Uno de los desafíos es la falta de adherencia al tratamiento, lo que lleva a la necesidad de desarrollar nuevas opciones que atiendan las necesidades no cubiertas de los pacientes, especialmente en casos moderados a severos.

En otros países, existen tratamientos orales que bloquean selectivamente la inflamación, mejorando los síntomas y la calidad de vida, pero estas opciones aún no están disponibles en México.

Gestionar comorbilidades

La atención de la psoriasis no solo implica tratar las lesiones cutáneas, sino también gestionar las comorbilidades, requiriendo un enfoque multidisciplinario con especialistas como dermatólogos, reumatólogos, internistas y cardiólogos.

La falta de un control adecuado afecta las relaciones personales, la vida laboral y la salud emocional, por lo que el apoyo psicológico y familiar, así como el autocuidado, son fundamentales para mejorar la calidad de vida del paciente.

El Día Mundial de la Psoriasis, celebrado el 29 de octubre, busca concienciar a la sociedad mexicana sobre la realidad de vivir con esta enfermedad y solidarizarse con quienes la enfrentan diariamente.